Casa de la Acequia

La Casa de la Acequia es un edificio colonial situado en la calle San Jerónimo, en el cruce con Isabel la Católica. Las acequias constituían una compleja red de canales que distribuían los productos agrícolas por la antigua ciudad isleña. No empezaron a secarse en serio hasta el siglo XVIII; más tarde se cubrieron por completo.

Una torre de control de la época colonial reguló el tráfico de canoas y barcazas durante muchos años. El canal se llamaba Acequia de Rodán y se mantuvo en uso durante gran parte del periodo colonial. Hoy la calle se llama Regina. La torre se convirtió más tarde en esta casa que rodea un patio que sigue los contornos de ese canal original.  El mismo patio pudo haber tenido muelles de carga para recibir productos enviados desde el sur hasta Xochimilco, o incluso más lejos. La arquitectura que rodea el patio es de gran interés para los arquitectos e historiadores precisamente por esta razón. También sobreviven algunos restos del canal debajo del comedor.

La casa actual fue muy ampliada en el siglo XVIII. En esa época era propiedad del Conde de Guadalupe del Peñasco. Se dice que el edificio fue utilizado posteriormente como beguinaje, es decir, como casa de monjas de Alumbrado, posiblemente de una orden gnóstica tardía. Es posible que, simplemente, no estuvieran afiliadas a una de las órdenes dominantes de la época.

La Casa de la Acequia llegó a albergar posteriormente el Ateneo Español. Fue fundado por los refugiados españoles que llegaron tras la Guerra Civil y el ascenso del régimen franquista. Todavía muy bien conservado, hoy el edificio se utiliza para conferencias, exposiciones y presentaciones de libros y, en ocasiones, funciona como centro cultural. En la actualidad, el edificio alberga la Librería Madero, de libros antiguos, que puede permitirle echar un vistazo al menos a su interior.

Fuentes citadas en esta página:
Centro Histórico, 200 lugares imprescindibles
Héctor de Mauleón; Casa de la Acequia

La Jornada, Ángeles González Gamio;
La Casa de la Acequia